Una de las dudas más frecuentes en consulta a la hora de realizar una mastopexia es decidir si es o no necesaria una prótesis mamaria.
El paso del tiempo, la edad, embarazos, cambios de peso y lactancia pueden hacer que el pecho de una mujer quede flácido o pierda su forma natural.
Para dar solución a este problema, existe la intervención de mastopexia o elevación de mamas.
¿Qué es la mastopexia?
La mastopexia es una intervención quirúrgica que eleva el pecho caído devolviéndole su forma natural. De esta forma, nos permite corregir ese aspecto, que queden más altos y revertir la sensación de decaimiento.
Cuando además de realizar la intervención de elevación de senos queremos aumentar su volumen o darle una forma más redondeada, podemos combinar la mastopexia con la colocación de prótesis.
¿En qué casos se realiza la mastopexia con o sin implantes?
Dependiendo del caso y de los objetivos de cada paciente, se elegirá entre realizar la intervención de una manera u otra.
Es decir, dependerá del volumen que tengan las mamas, o del deseo de la paciente de aumentar la talla al mismo tiempo que se levantan las mamas.
Lo principal y recomendable, es consultar tu caso con un cirujano plástico que pueda valorarlo de forma personalizada y poder explicar bien las ventajas e inconvenientes de cada opción.
Mastopexia sin prótesis
En los casos en los que el volumen de la mama sea suficiente para obtener un buen resultado estético, y la paciente no desee aumentar de talla, el cirujano eliminará el exceso cutáneo y remodelará las mamas para devolverles la forma y posición deseadas.
Mastopexia con prótesis
Si, por el contrario, se desea aumentar el volumen de las mamas, o cuando el cirujano haya considerado que sin implantes no será posible conseguir un buen resultado estético (debido a una gran pérdida de volumen), se valorará la colocación de una prótesis.
Si estás pensando en realizarte una intervención de mastopexia y necesitas algún tipo de información al respecto, no dudes en ponerte en contacto conmigo.
